Almudena Durán
Escritora
Almudena Durán acaba de publicar Lina golosina. Un libro dirigido a niños a partir de 6 años para que entiendan cómo se convive con la diabetes y lo que esta enfermedad implica a edades tan tempranas (sentimientos, experiencias, vivencias, etc.). Para ello, la obra cuenta con bonitas ilustraciones y una narrativa que promueve valores fundamentales como el respeto, la diversidad o el acompañamiento.
La escritora considera que tratar la salud con las más pequeños es muy importante. Desde su experiencia, los cuentos y libros de literatura infantil introducen información y grandes valores a los niños de forma sencilla, siendo un medio didáctico que ayuda a que todos puedan entenderlo.
Mi hermano debutó a los 13 años con diabetes tipo 1 y tengo familiares con diabetes tipo 2. Así que, es una enfermedad que me toca muy de cerca.
Decidí escribirlo hace dos años. Mi amiga Carolina, que es profesora y tiene una hija pequeña, me comentó que la diabetes es muy desconocida en los colegios, pese a que es habitual que haya algún alumno con diabetes. Alumnos y profesores no están familiarizados con la enfermedad. Entonces, creí que hacer un libro infantil en el que su protagonista tuviera diabetes y describiera su experiencia podría ser la llave para introducir la diabetes en los colegios y ayudar a que tanto peques como profesores sean más tolerantes con los niños con diabetes.
“Me gustaría que este libro fuera la llave para introducir la diabetes en los colegios y ayudar a que tanto peques como profesores sean más tolerantes con los niños con diabetes”
La protagonista del libro, que ahora es adulta, se llama Catalina. Ella nos cuenta desde su recuerdo de niña cuando estudiaba primaria, donde la llamaban Lina, cómo fue todo el proceso de su diabetes, desde cómo debutó y sus síntomas, hasta cosas que le sucedían en el colegio, conocer su cuerpo y conocer amigos que también la padecían, como Chelo, que lleva bomba de insulina. El libro da a conocer capítulo a capítulo las distintas situaciones que se pueden dar en el día a día de un peque con diabetes, tanto si acaba de debutar, como si ya es diabético o si se tienen amigos o familiares con diabetes.
Creo que lo que más desconoce la gente son los cambios de humor que pueden producirse por culpa del azúcar, sobre todo en los niños. En ellos es más complicado regular el azúcar. Y este ha sido uno de mis objetivos, dar a conocer esta situación. Espero haberlo plasmado bien para que los peques lo entiendan y sus familias también.
El principal objetivo es plasmar, que en mi casa se dio el caso, que llevar una bomba de insulina puede ser beneficioso y que no es una vergüenza llevar un dispositivo que te ayuda en tu día a día. También el no esconderlo y que en el colegio o tus amigos sepan que eres diabético. Recuerdo que a mi madre esto la traía de cabeza porque pensaba que mi hermano no tendría pareja o amigos si lo decía. Así, he querido reflejar, y espero haberlo conseguido, que, aunque es una enfermedad, es un modo de vida que se puede llevar bien con control y con ayuda médica. También he querido dar importancia a la salud y a acudir al médico. Muchos padres suponen cosas o automedican a los peques y no somos médicos.
Creo que el libro puede ayudar a muchas familias de niños que debutan con diabetes a entender todo lo que puede pasar, desde la importancia de acudir al médico, pasando porque existen muchos avances que mejoran mucho la calidad de vida, hasta que otras personas, niños o adultos, conozcan la enfermedad.
En definitiva, aunque es un libro para niños a partir de 6 años, creo que puede ayudar a muchas personas a entender la diabetes y conocerla de manera sencilla.
“La diabetes no te limita tu vida si se tiene un control de la misma y ayuda médica”
Si conocéis un poco la pedagogía Montessori, siempre trata de que el niño sea capaz de entender el concepto de cualquier cosa por sí mismo. María Montessori decía que “el adulto sólo era un estorbo en el aprendizaje del niño”. En el libro, con un lenguaje sencillo y con una protagonista superheroína, se trata este fin, que de manera sencilla y por sí mismos se interiorice qué es la diabetes y cómo se siente una persona con diabetes en distintos escenarios. Es una manera de conocer y poder ayudar a amigos y familiares.
Además, en todos mis libros añado actividades o explicaciones de los valores que se transmiten en ellos. Como asistente Montessori, es una manera de crear un proyecto que se puede tratar en el aula enfocado en un taller dedicado a la salud.
Un libro infantil debe contener información que los niños sean capaces de comprender por sí mismos, un lenguaje sencillo, ilustraciones que acompañen el texto para enfatizar lo que se transmite y, a mi parecer, un proyecto educativo que transmita valores.
Creo que, como he comentado a lo largo de toda la entrevista, puede ayudar a muchas familias, tanto a los peques como a los adultos, a entender qué es la diabetes, a qué afecta y cómo es su cuidado.
Mi mayor inspiración son mis tres hijos. Son curiosos y me han hecho preguntas realmente importantes, lo que me ha llevado a plantearme plasmarlas en libros ya que otros niños pueden tener las mismas dudas.
En mi segundo libro la pregunta fue “¿Mamá por qué yo no me apellido igual que mis hermanos?” Y eso me llevó a escribir ¡Vaya lío de nido!. En él, mediante un árbol y distintos tipos de ave, mostraba que una familia puede tener muchas ramas y ser un único árbol con muchos nidos.
En el caso de Lina Golosina han sido mi hermano y Paula, la amiga de mi hija menor, las fuentes de inspiración.