El control de las comidas
Los niños y adolescentes con diabetes deben seguir un plan de comidas que en general es muy semejante a la dieta correcta de un niño sano. Los menús que se sirven en un comedor escolar deben ser equilibrados tanto en el tipo de alimentos, como en la calidad y variedad de los mismos.
El colegio debe proporcionar con antelación a los padres el plan de comidas diario para que ellos hagan las especificaciones concretas sobre qué alimentos tienen que evitar y la cantidad que deben comer de los mismos.
Hay que tener en cuenta que muchos de los niños con diabetes precisan tomar alimentos que contengan hidratos de carbono a media mañana y media tarde para evitar las hipoglucemias.
Se pretende evitar intervalos de ayuno que sean superiores a las cuatro horas.
Repercusión en la vida escolar
Los cuidadores, o el personal que tiene a su cargo los niños con diabetes durante las comidas, deben supervisar lo que realmente comen (tanto el tipo de alimento, como la cantidad) asegurándose de que toman todo el alimento planificado y a la hora adecuada. Esto es muy importante para evitar tanto las hipoglucemias como las hiperglucemias.
Además, hay que permitir al niño que ingiera alimento en clase cuando lo necesite, esto es imprescindible para evitar las hipoglucemias.
En caso de hipoglucemia tienen que tener acceso libre a los alimentos necesarios.