Los controles en sangre
Los niños con diabetes necesitan conocer con frecuencia sus niveles de glucemia para no correr riesgos de que ésta esté baja, o demasiado elevada, y poder actuar en consecuencia.
En general, todos los niños con diabetes necesitarán realizarse controles de glucemia en el horario escolar. Esto es tan fácil que, excepto en los niños muy pequeños, lo pueden realizar ellos mismos. Acostumbra a ser la primera maniobra que el equipo sanitario les enseña a hacer. Si se trata de niños no pequeños pero todavía no suficientemente autónomos deben ser supervisados.
El autoanálisis en sangre capilar es prácticamente indoloro.
Repercusión en la vida escolar
Hay que facilitar la realización de estos análisis en el horario escolar, por lo que si al niño no le supone ningún problema debería poder hacerlos en clase. En caso contrario, se le debe facilitar un lugar adecuado e higiénico.
Los padres (o el propio niño si es mayor) deben enseñar a los profesores y cuidadores la técnica del autoanálisis, y los valores considerados normales, para ayudar al niño a hacerse los controles y tener criterios para valorar la situación (si está alto, normal o bajo).
El niño tiene que aportar al colegio todo el material necesario para la realización de los análisis y debe poder contar con un lugar higiénico y seguro donde guardarlo.
Algunas veces, hacer controles en sangre puede convertirse en un juego, hay que tener cuidado de que las microagujas que se utilicen no sean compartidas por nadie para evitar riesgos