¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad crónica en la que el cuerpo no puede producir o usar de una manera efectiva la insulina, la hormona que nos ayuda a transportar la glucosa. La glucosa es el azúcar que nos proporciona el combustible básico del cuerpo a las células que producen energía.
Si el páncreas no fabrica la insulina adecuadamente, o las células no pueden usarla, el metabolismo del cuerpo se desequilibra. Las células se ‘mueren’ de hambre y los músculos se quedan con poco o nada del combustible que necesitan. Todo ello provoca cansancio y debilidad, además de otros síntomas.
Por otro lado, la glucosa que no se ha podido metabolizar entra en el torrente sanguíneo y se produce la conocida hiperglicemia hasta que se elimina a través de la orina. A la larga esto puede ser tóxico para todo el organismo. De hecho, una subida incontrolada de azúcar en sangre puede llegar a ser mortal.
Existen varios tipos de diabetes, aunque los más comunes son:
Diabetes tipo I: que suele debutar en personas jóvenes.
Diabetes tipo II: se conoce como la diabetes adulta que puede ser insulino dependiente o no.
Debido a que la diabetes puede ocasionar otro tipo de complicaciones, por ejemplo, hipertensión, los especialistas señalan que es importante que un diabético hable con su médico sobre qué tipo de ejercicios debe realizar para controlar sus niveles. Así como seguir el plan de seguimiento que aconseja el especialista