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General   Fundación para la Diabetes

La obesidad en personas mayores. Causas y consecuencias

Los factores que causan sobrepeso en personas mayores no siempre son ni mucho menos los mismos que los que causan obesidad a la población de otras franjas de edad. Veamos primero de todo las causas más habituales en la tercera edad.

Causas más habituales

Metabolismo más lento: Con el envejecimiento, el metabolismo basal disminuye, lo que significa que el cuerpo quema menos calorías en reposo. Si no se ajusta la ingesta calórica, es probable que se gane peso.

Pérdida de masa muscular: Con la edad, la masa muscular disminuye, un proceso conocido como sarcopenia. Los músculos queman más calorías que la grasa, por lo que esta pérdida contribuye a un menor gasto energético diario.

Menor actividad física: Muchas personas mayores reducen su nivel de actividad física debido a problemas de movilidad, fatiga o enfermedades crónicas, lo que puede llevar a un desequilibrio energético.

Factores hormonales: Cambios hormonales asociados con el envejecimiento, como la disminución de hormonas como el estrógeno y la testosterona, también pueden influir en la acumulación de grasa corporal.

Medicamentos: Algunos medicamentos comunes entre las personas mayores, como los antidepresivos, esteroides o medicamentos para la hipertensión, pueden provocar un aumento de peso.

De este modo, ya que nos hemos centrado en describir las casas específicas de obesidad en personas mayores, pasemos a desarrollar las consecuencias (también específicas):

Enfermedades cardiovasculares: La obesidad es un factor de riesgo para la hipertensión, la enfermedad cardíaca y el accidente cerebrovascular, condiciones que son especialmente peligrosas en personas mayores.

Problemas articulares: El sobrepeso ejerce una presión adicional sobre las articulaciones, lo que puede acelerar la aparición o el empeoramiento de la osteoartritis, especialmente en las rodillas y las caderas.

Deterioro de la movilidad: La obesidad reduce la movilidad en las personas mayores, lo que puede limitar su capacidad para realizar actividades cotidianas y contribuir a un mayor aislamiento social y una menor calidad de vida.

Riesgo de caídas: El exceso de peso puede afectar el equilibrio y la estabilidad, lo que incrementa el riesgo de caídas, una de las principales causas de lesiones graves en los ancianos.