Un dispositivo mejora el control glucémico en pacientes con hiperinsulinismo sin páncreas
MADRID. Investigadores del Hospital Infantil de Filadelfia (CHOP), en Estados Unidos, han demostrado que un dispositivo experimental puede mejorar el control de la glucemia en pacientes que desarrollaron diabetes después de que se les extirpara el páncreas para tratar su hiperinsulinismo, una enfermedad genética en la que el páncreas produce demasiada insulina, según publican en la revista 'Diabetes Care'.
Mediante una combinación de monitorización continua de la glucosa, dos bombas hormonales y un algoritmo, el dispositivo, conocido como páncreas biónico bihormonal (BHBP) y desarrollado por investigadores de la Universidad de Boston, ayudó a los pacientes de hiperinsulinismo (HI) con diabetes a mantener estables sus niveles de glucosa durante el periodo de estudio.
"El control de los niveles de glucosa en los pacientes con HI y diabetes pospancreatectomía es extremadamente difícil porque tienen insulina residual muy desregulada, por lo que a menudo fluctúan entre niveles bajos y altos de azúcar en sangre", explica Diva D. De León-Crutchlow, Jefa de la División de Endocrinología y Diabetes y Directora del Centro de Hiperinsulinismo Congénito del Hospital Infantil de Filadelfia.
"Nuestro estudio demuestra que el páncreas biónico bihormonal ofrece un control glucémico a estos pacientes sin el riesgo de error humano en el cálculo de las dosis", añade.
El HI congénito es un trastorno genético en el que las células del páncreas, llamadas células beta, segregan demasiada insulina. Dado que la insulina ayuda a transportar la glucosa de la sangre a las células, el exceso de insulina provoca un nivel bajo de azúcar en la sangre, o hipoglucemia, una situación peligrosa que puede provocar convulsiones, daños cerebrales y posiblemente la muerte.