La sanidad cántabra pagará el sensor que evita los pinchazos a niños y adultos con diabetes
La sanidad pública de Cantabria financiará los medidores continuos de glucosa que sustituyen los pinchazos en los dedos por un sensor en el brazo que permite ver en la pantalla del dispositivo los niveles en cualquier momento del día y de la noche.
El sistema Flash, reivindicado especialmente para los niños por la Asociación de Diabetes de Cantabria hace apenas dos semanas, con motivo del Día Mundial de la enfermedad, y que hasta ahora pagaban los propios pacientes de su bolsillo (120 euros al mes), se incluirá en la cartera del Servicio Cántabro de Salud (SCS) «en el primer semestre de 2018», como avanza la subdirectora de Asistencia Sanitaria, Ana Tejerina, para «aquellos grupos de pacientes donde hay evidencia científica de que es muy útil». Concretamente, «tendrán acceso a esta nueva prestación todos los menores desde los 4 a los 18 años que necesiten pincharse más de seis veces al día, que son la gran mayoría (todas las diabetes tipo 1)». En este grupo, se calcula que los beneficiados serán 129 (104 menores de 16 años, más otros 25 de entre 16 y 18 años). Pero, a diferencia de otras comunidades autónomas, que han anunciado recientemente la financiación de estos medidores solo para niños y adolescentes, Cantabria será la primera que extienda esta prestación también a adultos «pero en circunstancias muy concretas». Desde el SCS aclaran que estará limitado «a aquellos pacientes con diabetes tipo 1, que necesitan mucho control. Es decir, que utilizan insulina, que tienen una tasa de hemoglobina glicosilada por debajo del 7,5% y se pinchan más de ocho veces al día para un control metabólico adecuado». Asimismo, Tejerina apunta que «se indicará para las mujeres con diabetes tipo 1 antes del embarazo, ya que por tratarse de pacientes que tienen más riesgo de complicaciones, precisan más de seis pinchazos al día, por eso nos interesa que estén muy bien controladas antes».