La SED denuncia desigualdades autonómicas "inexplicables" en atención a diabetes
Edelmiro Menéndez, presidente de la Sociedad Española de Diabetes (SED), ha denunciado en la presentación del XXVII congreso nacional de esta sociedad científica la existencia de diferencias entre comunidades autónomas "que no tienen explicación, incluso en el acceso a los nuevos fármacos o los nuevos métodos de monitorización". Según ha recalcado, "deberíamos garantizar el acceso a estas nuevas tecnologías de monitorización y a los nuevos tratamientos a todo aquél que lo necesite y de una forma igualitaria entre territorios".
Para el presidente de la SED, los nuevos sistemas de monitorización de la glucemia "están ya maduros, son fiables y han demostrado su utilidad para conseguir un mayor control de la diabetes y una mejor calidad de vida para los pacientes, especialmente cuando están asociados a bombas de infusión de insulina, por lo que es el momento de que las administraciones sanitarias se planteen su financiación".
Con una población de más de cinco millones de diabéticos en España, "es una demanda que los sistemas sanitarios financien estas mejoras, que mejoran su calidad de vida y el control de la diabetes", ha dicho.
Sonia Gaztambide, presidenta del comité organizador del congreso y jefa del servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Cruces, ha insistido en la idea y ha dicho que resulta indispensable "buscar la máxima eficiencia, seleccionando las indicaciones más idóneas para el uso de estos dispositivos, ya que no todas las personas están dispuestas ni tienen capacidad para utilizar algunos de los nuevos recursos".
En el ámbito pediátrico, Raquel Barrio, coordinadora de la Unidad de Endocrinología y Diabetes Pediátrica del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid y vicepresidenta de la SED, ha destacado que en el ámbito pediátrico, desde febrero de este año ya es posible emplear sistemas de monitorización "que miden los niveles de glucosa en el líquido intersticial a partir de los cuatro años de edad". Estos dispositivos, "que no cuentan con financiación pública", no requieren calibración por parte del usuario y evitan en muchas ocasiones la monitorización de la glucemia capilar, proporcionando a los profesionales ya los pacientes las variaciones de la glucosa durante las 24 h del día, "facilitando las decisiones sobre el tratamiento más adecuadas".
Otro dispositivo que se encuentra fuera de la financiación pública "salvo excepciones puntuales", es el sistema integrado de bomba de perfusión subcutánea continua de insulina y monitorización continua de la glucosa intersticial. Según ha advertido, desde hace un año ya se puede contar con una parada automática de la bomba de perfusión mediante el empleo de algoritmos que predicen el riesgo de hipoglucemia en 30 minutos.