«Es inaudito que haya colegios de miles de alumnos sin un auxiliar sanitario»
La vida de los pequeños con diabetes en edad escolar y de sus familias no es sencilla. Son niños que están obligados a llevar cada día al colegio la insulina que necesitan, y que deben pincharse un mínimo de cuatro y cinco veces al día, algunas dentro del horario de clases. La rutina no es fácil de cumplir, y menos para los más pequeños. Esta situación hace que, según un estudio de la Fundación para la Diabetes, la mitad de los padres con niños diabéticos haya tenido que modificar de alguna manera su actividad laboral para poder atender a su hijo de forma apropiada.