Los edulcorantes
Dietista-Nutricionista e Investigador del CIBERDEM (Hospital Clínic de Barcelona). Asesor en Nutrición y Deporte de la Fundación para la Diabetes.
Información cedida por: Grupo Menarini - www.dmtipo2.com
Su uso es cada vez más habitual en muchos alimentos. Básicamente, debemos conocer dos tipos:
Otro edulcorante habitual es la fructosa. Sin embargo no se aconseja utilizarla, pues eleva la glucemia y aporta calorías de igual modo que la glucosa o el azúcar.
Cómo los encontramos en los alimentos:
- Bebidas light, free o «sin azúcar». Suelen estar compuestas de mezclas de edulcorantes no calóricos (sacarina, aspartamo, etc.), por lo que no acostumbran a aportar hidratos de carbono ni a elevar la glucemia. Los zumos de frutas pueden contener los azúcares propios de la fruta con la que están elaborados.
- Chicles y caramelos «sin azúcar». En la mayoría de los casos utilizan polialcoholes como edulcorante. Su abuso significaría un aporte importante de hidratos de carbono.
- Pastelería, bollería, galletas o turrones. Suelen utilizar polialcoholes, con lo que consiguen reducir en un 10-30% el efecto sobre la glucemia.
- Chocolates y helados. Utilizan polialcoholes, pero en mayor cantidad que en pastelería o bollería, por lo que el efecto sobre la glucemia se reduce en un 50% aproximadamente
Consejos prácticos:
- Tenga en cuenta los valores nutricionales del alimento siempre según la ración que se vaya a consumir.
- Todos los hidratos de carbono incrementan la glucemia, por lo que no solamente es importante elegir alimentos con bajo contenido en azúcares.
- ¡Precaución! Mensajes como «Apto para diabéticos» o «Sin azúcar» no indican que los alimentos sean de consumo libre para pacientes con diabetes.
- Antes de comprar un alimento «sin azúcar» o «apto para diabéticos» compare la etiqueta nutricional con la del alimento tradicional. En muchas ocasiones las diferencias son mínimas.
- Valore el tipo de edulcorante utilizado en los alimentos. No todos están libres de efecto sobre la glucemia.